Los alumnos de los centros escolares Monte Oroel, Escuela hogar, San Juan de la Peña, Escuelas Pías y el Instituto de Formación Agroambiental (IFA) de Jaca pueden degustar este curso una vez al mes productos de la zona en el comedor escolar. Los colegios, los productores del vivero de Jaca de ADECUARA y hortelanos de la comarca, y el consistorio jaqués han puesto en marcha un proyecto piloto en los comedores que lleva hasta los centros alimentos producidos en la zona. El proyecto se presenta a las ayudas Leader gestionadas por ADECUARA.
Cerca de 600 niños y jóvenes se benefician de esta iniciativa que, en palabras del presidente de Adecuara, Luis Gutiérrez, “ofrece productos de calidad y una dieta sana”. Un proyecto que en un futuro próximo plantea también la posibilidad de que los alumnos visiten las empresas que proveen esos alimentos, los viveros del Grupo Leader, explotaciones ganaderas, huertos… y una campaña de promoción de los alimentos. Y si finalmente se consolida, la idea es ampliarlo a otros colegios del Alto Gállego y a otro tipo de centros, como podrían ser residencias de la Tercera Edad o el Hospital.
Este jueves 13 de octubre se prepararon 540 menús en los que se utilizaron 20 kilos de calabaza, 15 de borraja, 50 de judías verdes y 60 de patata ecológica para los primeros platos. Para los segundos, el plato fue Ternera del Valle de Aísa, de la que se prepararon 68 kilos. Albóndigas de cordero, croquetas o boliches de Embún son las propuestas para los próximos meses.
El concejal de Educación del Ayuntamiento de Jaca, Enrique Muñoz destacó en la presentación del proyecto que con este proyecto, se reparten entre los usuarios de los comedores escolares de la localidad “alimentos frescos, sanos y de proximidad».
Para poder organizarse, Inmaculada Lafita y Javier Cazcarro, dos de los productores que han iniciado este proyecto, explican que se van a constituir una cooperativa que cuenta ya con más de una decena de interesados, la mayoría relacionados con los viveros de Adecuara, pero también hay promotores particulares y hortelanos, que buscan por un lado dar a conocer los productos “kilómetro 0”, dar salida a su producción y generar economía en la comarca.
